4 DE OCTUBRE.
Hoy era el día que el Servicio de Limpiezas Municipal desarrollaba su plan de «limpieza de choque» en el Barrio «Puerta de Madrid» según fuentes institucionales.
Muchos lo hemos estado esperando como agua de mayo o más bien de otoño. Esperábamos recuperar espacios de juego, de paseo y de paso.
Son las 20:00 horas y seguimos con la misma situación que hace 16 días.
Después de un viernes 28 sept. lleno de aguas, la tierra de los alcorques que rodean los pocos árboles y farolas de la c/Pablo Coronel y c/ Pedro de Lerma, se ha convertido en fango, un fango que además ha petrificado los restos de suciedad, basura y ramas no recogidas en semanas anteriores.
Como en estos días, se ha ido incrementando la cantidad de basura, se ha convertido en un espacio maloliente, con habitantes animales no deseados (ratas) y con desechos orgánicos en mal estado.
El asfalto y las aceras están impregnados de restos que transmiten una imagen muy deteriorada del barrio.
Lo más triste es ver a niños paseando por esas zonas, entrando en el IES Mateo Alemán y jugando a la peonza en esos mismos lugares.
Ahora mismo, corre hedor por el pasillo del Ies y alrededores.
Ahora mismo, muchos de los vecinos nos planteamos y preguntamos qué alternativas tiene esta situación.
Nosotros, educadores y vecinos, tenemos una responsabilidad propia y de cara a nuestros usuarios en las actividades y es informar/facilitar/educar/concienciar en hábitos saludables y cívicos.
Nosotros somos una pequeña balsa en la inmensidad del Barrio Puerta de Madrid.
Nos sentimos solos . La tristeza e irritación de los vecinos es palpable (que realmente quieren y desean una buena convivencia y un barrio limpio ). Si no hay intención de mejorar la calidad de vida en el distrito y en concreto en este barrio, donde las dificultades sociales son evidentes, ésto va a ir a peor. No debe haber desidia institucional (ayudar a salir del pozo de la suciedad y dar «decoro» y «salud» al barrio. Éste problema no se quita con dos barridos.La presencia de los equipos de limpieza viaria debería ser respetada, pero sobre todo mantenida con constancia y profundidad en nuestras calles y plazas.
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